Hola queridos chichipíos, nuevamente intentando comunicar mis ideas por escrito, ya que el físico está un poco cansado y no resiste tanto como la palabra. Podré morir yo, pero "ideas nunca mueren" (según dijera Sarmiento, con quien podremos coincidir o no, pero no me digan que esta frase no es genial) Nos da una idea de continuidad, algo que muchos humanos necesitan. Yo, personalmente creo, que todas mis partículas serán repartidas entre todos los seres vivientes (léase humanos, otros animales, rocas, estrellas, meteoros, etc), pero mis ideas, por tonta que parezcan influirán en algunos, que serán movilizados y llevados a tomar decisiones, que cambiarán el rumbo de la historia. No olvidemos, que la historia la escribimos nosotros, aunque no seamos famosos, populares o lo que fuera. Cada mínima acción, produce un efecto, que muchas veces, o casi siempre, no podemos vislumbrar, pero es así. Lo que los físicos llaman efecto mariposa, una mosca muere en Islandia, y se produce un terremoto en China. La complejidad de las inter-relaciones entre todos los seres, nosotros no podemos comprenderla, y es por eso, que por ejemplo, los argentinos esperan resultados instantáneos con las acciones de la Señora Presidente. Pero no es así, han votado, por empezar a los mismos criminales de siempre, por lo tanto, obtendrán los mismos resultados. Como dijera Einstein, si queremos obtener un resultado distinto tendremos que cambiar algunos pasos del algoritmo que seguimos, pues si no continuaremos frustrándonos y así tendremos menos deseos de luchar, pensando que la victoria es imposible.
Reciencito un joven golpeó a mi puerta, y me entregó una bolsa para junte todo aquello que sea residuo seco. Ésto me emocionó mucho, y confirma mi confianza en los jóvenes de quienes siempre estoy aprendiendo. ¡Es increíble! , aunque yo siempre reciclo, estos jóvenes pertenecen a una cooperativa que va a recuperar los deshechos secos. ¡Aleluya! algo, por mínimo que sea, estamos haciendo bien en estos tiempos. Si bien, hay gente que se dice adulta, y está todo el día con mala cara, hablando pestes del gobierno, de lo mal que les va, mientras se van de vacaciones, compran en confiterías caras, aquí en Adrogué; estos jóvenes están haciendo algo por el futuro.
Personalmente, yo debo aprender mucho. Normalmente mi hija Daniela, apunta sobre aquello que no hago tan bien, y por lo general, aunque peleamos, como cualquier madre e hija, yo aprendo. Esto me satisface, porque siempre he sostenido que no sé nada y esa es la mejor manera de aprender. Sobre todo los jóvenes, tienen mucho por enseñarnos, obvio también de aprender, pero el conocimiento no es patrimonio de los adultos, se construye entre todos, jóvenes y no tan jóvenes.
Si queremos tener una oportunidad para el futuro, debemos escuchar y aprender de los jóvenes, tienen mucho para dar. No los pongamos tristes, mostrémosles que el camino de la lucha, es el único posible, el que nos permitirá a nosotros y nuestra descendencia mejorar, sin dañar a los demás.
Quiero agregarles una poesía, que me inspiró el poeta venezolano Carlos Angulo. "Vermuth con papas fritas y good show"
¡QUÉ LEJANA ESA NIÑEZ!
¡Qué lejana esa niñez que
evoca los azahares y los ciruelos
de la casa de mi padre.
¡Qué lejana esa niñez,
que evoca la inocencia,
los juegos inventados,
las conversaciones secretas,
bajo el aromo.
¡Qué lejana esa niñez que
evoca el silencio y el olor
de la madera, en el gran comedor.
¡Qué lejana esa niñez que
me lleva a mi madre,
que me reúne con aquellos
que una vez fueron mis amigos.
¡Qué lejana esa niñez!
De las fiestas bautismales,
De la confirmación de las creencias,
Del dorado pasto, creciendo
Rebelde por todo el terreno,
Cubierto en parte de paraísos intrépidos,
Aromos atrevidos, ciruelos ávidos de perfume.
¡Qué lejana esa niñez mía!
