Hola, queridos chichipíos, cómo están, durmiendo, viviendo cómo muertos o qué. Qué difícil es despertar, cuando uno está dormido o muerto. Cómo revivir, cómo despertar. Ésto es muy duro. No podemos revivir a aquellos que ya han doblado la curva de la vida, y están más cerca del arpa, que de sus familiares, amigos, de toda la gente en general. Renovar las ideas, implica no tener los estantes, clavados en el cerebro. Significa, tener una estantería armable y fácilmente desarmable, para poder estructurar nuestro pensamientos, y a la vez, que nuevas corrientes de ideas, mejores que las que ya tenemos, puedan ser incorporadas, sin ningún problema. Esta facilidad, que nos permite rearmar nuestros pensamientos, constatemente, tal como lo exigen los tiempos que corren, sólo es posible a través de una semiología permanente de imágenes, propagandas, programas radiales y televisos, de los discursos periodísticos y políticos. Es cierto, que ésto puede parecer cansador, para un novato. Pero, cuando uno está entrenado, se hace casi sin tener un pensamiento acerca de ello. Nuestra mente funciona como una computadora, de manera que debemos mantenerla entrenada, para poder actualizarnos, sin perder de vista nuestra integridad personal, el bienestar de todos los seres vivos, el respeto irrestricto por todos los seres que nos rodean, sin importarnos el aspecto que detenten. Y algo más que importante, que he aprendido en los últimos años, sentirme bien con ésto de ser argentina. Primero los españoles, nos robaron tanto oro y plata, durante la conquista y genocidio en América, que si prentendiéramos cobrárselos, no tendrían con qué hacerlo. Sin embargo, sin ningún rencor recibimos a los inmigrantes de Europa. Bastante brutos, por cierto, pero que venían a cubrir sus necesidades alimentarias, los recibimos bien. Durante el gobierno de Perón, se les regaló a los españoles 120 mil toneladas de trigo, para que pudieran alimentarse, ya que la guerra civil, el gobierno de Franco y la Segunda Guerra Mundial, los había dejado en la total miseria. Como nos pagan: llamando sudacas a aquellos que van como inmigrantes a sus tierras, golpéandolos en la calle y en los transportes públicos, empleandolos en los puestos de más baja categoría, según ellos. En fin, actuando en nuestra contra constantemente.
Estoy decididamente con la Sra. Presidente, en todo lo que lleva adelante. De esta forma estamos pudiendo sortear la crisis del Capitalismo. Crisis que continuarán, pues ya para su existencia, deben asesinar sin mirar a quien. Fíjense, qué está pasando con Grecia. Están aplicando llas viejas recetas del FMI, que mantuvo en la miseria permanente, luego de 500 años de humillación, esclavitud y maltrato. Ahora que no estamos aplicando esas recetas, comenzamos a ver la luz. Luz que no verán los griegos, a menos que estén dispuestos a luchar por la democracia , que heredaron de sus ancestros. Deben seguir el ejemplo de Léonidas,a quien no le importó morir, pues de esa manera brindó la oportunidad de vencer al gran ejército persa. Algo impensable, que la acción de 300, comandados por uno, decidido y valiente, les permitiera obtener la victoria y deshacerse de un gran enemigo. En este caso, el grupo de los ocho, son el gran enemigo. Ya no necesitan empleados, para mantenerse en su trono. Al contrario, matarlos, significa menos bocas a las que darles alimentos baratos, pagarles salarios, en fin, permitir que se consuman el oxígeno que cada vez es menos.
No están pensando los europeos, la gente común de Europa, que cuando hayan eliminado a todos los pobres, que ellos mismos crearon, los matarán a los Europeos, y cuando se acaben, continuarán con los propios norteamericanos, cuyo imperio está en abierta decadencia. Su deuda total, es más del 100% del PBI, en tanto, que nosotros los argentinos tenemos esa relación en 48% del PBI. Será por eso, la brutal inmigración que estamos recibiendo. Si bien la Sra. Presidente ha marcado nuestra diferencia con los europeos, mientras nosotros tratamos de integrarlos, ellos tratan de eliminarlos. Creo, que aquí está el quiebre, compartir, permite que nos enriquezcamos, mientras que los que vienen mejoren sus espectativas y su calidad de vida.
No se duerman, despierten, antes que el monstruo esté lo demasiado cerca, como para destruirlos.
Vermut con papas fritas y good show".